Esta es la habitación de Teo, el hijo de Tali, quien tiene, además de un estupendo blog, "La belleza de las cosas", un gusto exquisito, como puede comprobarse en estas imágenes.
Cada una de las piezas que podemos encontrar en este dormitorio (desde la "rocking chair" de los Eames al más diminuto de los animalitos de plástico) tiene su importancia, su misión, en el esquema decorativo total, porque todos los objetos, por muy pequeños e insignificantes que parezcan, contribuyen a dotar al espacio de ese encanto especial que lo hace tan idóneo como cuarto de juegos y de descanso para el pequeño Teo.
Podéis encontrar el reportaje completo que escribí sobre este dormitorio en "Singulares Magazine". También un post con más imágenes inéditas sobre el mismo en el blog de "Singulares". ¡No te los pierdas!
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