Está en Malmo, en el sur de Suecia, y en ella se puede apreciar que su dueño es un verdadero apasionado de las antigüedades. Sin embargo, la vivienda del músico Magnus Lundgren no respira clasicismo rancio, más bien al contrario.
La atmósfera de los espacios es la de la contemporáneidad más trendey, la que promulgan los diseñadores más en boga como Jonh Derian o James Plumb. Una modernidad basada en el respeto que imprimen los años vividos por los muebles, visible en su pátina; en definitiva, la puesta en valor de la trayectoria de las piezas.
Una estética muy cercana al dirty-chic, donde lo que predominan son el color blanco en los revestimientos y las tonalidades claras en la madera, como corresponde a los interiores nórdicos.
Magnus Lundgren tiene un blog: Mäster Henriks, en donde da rienda suelta a sus dos grandes pasiones, las antigüedades y la música.
¿Qué os parece? Para mí, es una casa con muchísima personalidad, que denota claramente la de su propietario.
Imágenes: Sköna Hem
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