No sé lo que os sucederá a vosotros, pero a mí una de las acciones que más dudas me suscita al pensar en la decoración de un dormitorio es qué hacer con el cabecero de la cama. Los tradicionales (capitoné, forja, etc.) no me entusiasman demasiado y el hecho de prescindir de él tampoco, ya que me parece que la cama queda falta de "protección", y la habitación poco "vestida".
Sin embargo, me gustan muchísimo las propuestas DIY que vemos últimamente en las publicaciones deco: puertas y ventanas antiguas reconvertidas en cabeceros, por ejemplo. Otra alternativa que ha llamado mi atención últimamente es la que presenta la empresa Blik, especializada en vinilos decorativos.
Como podéis comprobar, nos ofrecen una colección de vinilos muy chulos que representan expresamente cabeceros de cama. Los hay para todos los gustos: clásicos, modernos, e incluso artísticos. Lo mejor de todo es que si te cansas de ellos, los despegas fácilmente y a cambiar de dormitorio:
¿Qué te parecen? ¿Los pondrías sobre tu cama?
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